La filosofía occidental nació de un lento proceso de evolución del modo de pensar, como alternativa a la explicación mítica de la realidad.
Como en el resto de culturas antiguas, la griega estaba basada en la mitología. El mito daba respuestas sobre la naturaleza, el ser humano y sobre el surgimiento y la estructura del cosmos.
Las características del mito son:
Los protagonistas de los relatos míticos son dioses que simbolizan las fuerzas de la naturaleza.
Los fenómenos naturales surgen de forma arbitraria, según la voluntad de los dioses.
Se centran principalmente en la explicación del origen y naturaleza del universo y del hombre.
Tienen patrones morales, ejemplos de comportamiento.
Estas explicaciones míticas empezaron a ser insuficientes para las mentes más avanzadas de la época.
La explicación filosófica surgió cuando ya no se creían que los dioses dominaran las fuerzas de la naturaleza. Así empezaron a pensar que todo sucede de forma ordenada.
Los primeros pensadores griegos creían que aunque todo cambia, siempre hay algo que permanece, la esencia. La esencia es lo que tienen en común un conjunto de individuos.
El verdadero conocimiento es separar lo esencial de lo particular.
Piensan que el universo y el ser humano, junto con el resto de seres, forman un todo ordenado y regido por las leyes naturales accesibles al entendimiento humano.
Más tarde se plantearon que el universo plural y múltiple podía reducirse a unos pocos elementos. Así intentaron saber que es aquello de lo que todo surge, de lo que todo se compone y a lo que todo vuelve: el arché.
Como en el resto de culturas antiguas, la griega estaba basada en la mitología. El mito daba respuestas sobre la naturaleza, el ser humano y sobre el surgimiento y la estructura del cosmos.
Las características del mito son:
Los protagonistas de los relatos míticos son dioses que simbolizan las fuerzas de la naturaleza.
Los fenómenos naturales surgen de forma arbitraria, según la voluntad de los dioses.
Se centran principalmente en la explicación del origen y naturaleza del universo y del hombre.
Tienen patrones morales, ejemplos de comportamiento.
Estas explicaciones míticas empezaron a ser insuficientes para las mentes más avanzadas de la época.
La explicación filosófica surgió cuando ya no se creían que los dioses dominaran las fuerzas de la naturaleza. Así empezaron a pensar que todo sucede de forma ordenada.
Los primeros pensadores griegos creían que aunque todo cambia, siempre hay algo que permanece, la esencia. La esencia es lo que tienen en común un conjunto de individuos.
El verdadero conocimiento es separar lo esencial de lo particular.
Piensan que el universo y el ser humano, junto con el resto de seres, forman un todo ordenado y regido por las leyes naturales accesibles al entendimiento humano.
Más tarde se plantearon que el universo plural y múltiple podía reducirse a unos pocos elementos. Así intentaron saber que es aquello de lo que todo surge, de lo que todo se compone y a lo que todo vuelve: el arché.